"Interesante puesta en escena de Mauro Molina, en donde se puede palpar esa atmósfera casi asfixiante que rodea a la tortuosa protagonista. Las excelentes interpretaciones de Valeria Tercia y de Lucía Urriaga, aportan esa sutil poesía corporal tan necesaria para aliviar todos aquellos tormentos que le acerca el texto y el desarrollo narrativo de tan densa obra teatral. La escenografía y el vestuario aportan un marco adecuado para el protagonismo exquisito de su iluminación a cargo de Horacio Novelle, quien crea un recinto casi siempre en penumbras, muy apropiado para que se oculten los diferentes espectros que acosan a la protagonista, todo un acierto estético, lo mismo debemos decir a la sugerente música original de Alejo Raynal cargada de nostalgia maleva y dramatismo. Recomendable pieza teatral por su inteligencia textual y la belleza estética que las protagonistas aportan a un drama cargado de miedos y fantasmas".
(Charly Borja. Descongelando Mentes)